El cálculo del Ejecutivo, afirma Alarcón, está basado en tener un aspirante a la Presidencia que genere mayores fracturas en la oposición y, en consecuencia, desconfianza en el electorado
El director del CEP-UCAB, Benigno Alarcón, afirma que el mandatario quiere un candidato que genere desconfianza en el elector.
"En 10 días, desde que la asamblea nacional constituyente ordenó al Consejo Nacional Electoral adelantar las elecciones presidenciales hasta que el PSUV oficializó la candidatura de Nicolás Maduro, el gobierno ha inhabilitado dos tarjetas electorales de la oposición: la Mesa de la Unidad Democrática, porque su validación contravendría la prohibición de doble militancia, y a Primero Justicia al no permitir, sin justificación, que renovara su nómina en la fase de reparos", explicó Alarcón.
Asimismo, describe que la escogencia de partidos y candidatos en tiempos electorales, a conveniencia del gobierno, es común en procesos de autocratización. “La estrategia es que Maduro compita con un adversario que él escoja para garantizar su permanencia en el poder. No porque sean amigos, sino porque tienen más oportunidad de perder en un evento electoral”, dijo.
El cálculo del Ejecutivo, afirma Alarcón, está basado en tener un aspirante a la Presidencia que genere mayores fracturas en la oposición y, en consecuencia, desconfianza en el electorado.
Asegura que deben existir condiciones mínimas que garanticen competitividad y transparencia en el proceso, y el tiempo es un factor determinante para certificar que el candidato podrá hacer su campaña y que el CNE realizará las auditorías. Alarcón, también director del Centro de Estudios Políticos de la UCAB, señala que Maduro manipula a la población y fomenta la incertidumbre en las reglas para tener certeza en los resultados electorales.
Fuente: El Nacional
Por Informe21 / MMJ